El miércoles 17 de diciembre, uno de los satélites de la constelación Starlink de SpaceX sufrió una avería que generó una nube de escombros y provocó una caída incontrolada hacia nuestro planeta. Un incidente poco habitual.
Este suceso reavivará el debate sobre la contaminación espacial. El satélite Starlink número 35956, que orbitaba a una altitud de 418 kilómetros, dejó de comunicarse repentinamente con los equipos en tierra. La anomalía provocó una «ventilación» del depósito de propulsión, una caída de altitud de unos 4 kilómetros y la expulsión de una serie de objetos rastreables a baja velocidad relativa.
En términos menos técnicos, el satélite probablemente sufrió algún tipo de explosión interna. LeoLabs, una empresa privada de vigilancia espacial, ya ha detectado «decenas» de fragmentos de escombros probablemente procedentes del incidente. La rápida caída de unos 4 kilómetros sugiere que se produjo algún tipo de explosión a bordo, aunque SpaceX no ha confirmado si se trató de un fallo interno o de un impacto con otro objeto.

El satélite siniestrado ahora deriva sin control, girando sobre sí mismo en su descenso hacia la atmósfera terrestre. SpaceX coordina sus esfuerzos con la Fuerza Espacial de los Estados Unidos y la NASA para vigilar los restos. Sin embargo, la empresa de Elon Musk quiere tranquilizar: el satélite debería «quemarse por completo» al reentrar en la atmósfera en las próximas semanas, sin suponer ningún peligro para la Estación Espacial Internacional ni para la población en tierra.
De hecho, la órbita del satélite se encuentra muy por debajo de la de la Estación Espacial Internacional, lo que descarta cualquier riesgo para la ISS y su tripulación. Los satélites Starlink están diseñados según una filosofía de «desechabilidad»: deben desintegrarse por completo al reentrar en la atmósfera para reducir el riesgo de que los restos alcancen la superficie terrestre.
Atascos en la órbita baja
Por espectacular que sea, este incidente es solo la punta del iceberg. Lanzada en 2019, la constelación Starlink cuenta ahora con cerca de 10 000 satélites en órbita. Y SpaceX tiene previsto desplegar varias decenas de miles más. Amazon también se ha sumado a la carrera con su propia megaconstelación, mientras que las potencias militares de todo el mundo miran con interés hacia el espacio. El número total de satélites podría alcanzar unos 560 000 en los próximos años.
Esto preocupa a los observadores, ya que esta proliferación está convirtiendo la órbita terrestre baja en una autopista congestionada donde se multiplican los riesgos de colisión. Durante el primer semestre de 2025, los satélites Starlink realizaron alrededor de 145 000 maniobras de evasión, lo que supone una media de cuatro por satélite y mes. Una cifra vertiginosa.

La semana anterior al incidente, SpaceX ya había dado la voz de alarma. Michael Nicolls, vicepresidente de ingeniería de Starlink, reveló que una nave espacial lanzada recientemente por un cohete chino había pasado a solo 200 metros de un satélite Starlink, aparentemente sin coordinación previa. «Por lo que sabemos, no se ha llevado a cabo ninguna coordinación ni resolución de conflictos con los satélites existentes», denunció en X. Y añadió:
La mayor parte del riesgo asociado a las operaciones espaciales proviene de la falta de coordinación entre los operadores de satélites. Esto debe cambiar.
En noviembre, una nave espacial china acoplada a la estación Tiangong fue golpeada por desechos espaciales en órbita, causando daños suficientes como para bloquear temporalmente a los taikonautas a bordo. El espectro del síndrome de Kessler se cierne ahora sobre la humanidad: las colisiones crean desechos, que pueden chocar con otros satélites, creando más desechos y, potencialmente, una reacción en cadena que destruiría todos los orbitadores y haría inaccesible el espacio.
SpaceX asegura que se toma el tema «muy en serio». Sus ingenieros están trabajando para identificar la causa de la anomalía y ya están implementando actualizaciones de software en toda la flota para reforzar las protecciones contra este tipo de incidentes.
